La alianza militar más importante de la actualidad redefine sus estrategias y ubica de forma precisa los riesgos más grandes de la humanidad. Por ello decide aumentar sus ingresos y gastos, y movilizar más fuerzas armadas para blindar su escudo.
Por Jairo Videa | @JairoVidea
Política
Madrid, España
Varios días de encuentros, fotografías, cenas y museos. Toda una jornada de mandatarios sonrientes buscando un lugar colectivo e individual en el nuevo reordenamiento mundial, surgido tras la invasión rusa en Ucrania, y empujado por las consecuencias económicas, sociales, militares y políticas en todo el mundo a raíz de la pandemia y el mismo conflicto armado. Y aunque no vimos torsos descubiertos, cómo Emmanuel Macron prometió durante el encuentro del G7 -mofándose de Vladimir Putin-, sí obtuvimos el nuevo Concepto Estratégico de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y los primeros movimientos y declaraciones en la nueva era de conflictos entre las potencias del ahora.
Los países miembros de la OTAN, también conocida cómo Alianza Atlántica, en una cumbre que finalizó este jueves 30 de junio en Madrid, capital española, acordaron nuevas decisiones que definirán sus próximos 10 años, consideradas por el cónclave "trascendentales" para su propia transformación.
Una lucha "más intensa" contra el cambio climático, un nuevo Fondo de Innovación de mil millones de euros para start-ups, más fuerzas armadas para responder a las amenazas y más palabras para describir los desafíos.
Rusia, la gran amenaza; China, el nuevo desafío
En este nuevo plan estratégico de la OTAN, el más reciente desde el aprobado en 2010, se "deja en claro que Rusia representa la amenaza más significativa y directa" para la seguridad de los países miembros de la Alianza y sus ciudadanos, cuyo número aumentará con el muy probable ingreso de Finlandia y Suecia a la Alianza. Jens Stoltenberg, Secretario General del organismo, explicó que la nación sede de la vieja Unión Soviética ya no es un "socio estratégico" y que China ya no puede ser definida con una sola palabra, como en el concepto anterior. "Los Aliados afirman que las políticas coercitivas de China desafían nuestros intereses, seguridad y valores", aseguró.
Por esa razón, la Alianza Atlántica estableció este nuevo ajuste en su posición conjunta, esperando "responder a una nueva realidad de seguridad" con "nuevas amenazas cibernéticas e híbridas".
"Reforzaremos nuestras defensas delanteras. Mejoraremos nuestros grupos de batalla en la parte oriental de la Alianza, hasta el nivel de brigada. Transformaremos la Fuerza de Respuesta de la OTAN y aumentaremos el número de fuerzas de alta preparación a más de 300.000", dijo Stoltenberg.
Esto implicaría un retroceso en la búsqueda de independencia estratégica que la Unión Europea mantenía desde hace varios años, debido a que estos movimientos supondrían más fuerzas armadas de los Estados Unidos de Norteamérica en territorio europeo. El aumento que se registrará aún es desconocido, pero representaría el mayor incremento desde la Guerra Fría, momento en el que llegaron a ser más de 400,000 soldados norteamericanos.
Más equipo posicionado previamente y reservas de suministros militares; más capacidades desplegadas hacia adelante, como la defensa aérea; el fortalecimiento del mando y control; y planes de defensa mejorados, con fuerzas preasignadas para defender aliados específicos. Los movimientos militares de la Alianza Atlántica ya fueron decididos por los mandatarios de los 30 países miembros.
"Esta es la primera vez desde la Guerra Fría que tenemos este tipo de planes con fuerzas preasignadas. Trabajarán con las fuerzas de defensa locales y se familiarizarán con el terreno local, las instalaciones y las existencias preposicionadas, para que podamos reforzar aún más rápido", explicó el secretario Stoltenberg.
"Una Ucrania fuerte e independiente es vital para la estabilidad de la zona euroatlántica"
Las acciones de apoyo a Ucrania también fueron protagonistas. Stoltenberg aseguró que la ayuda se mantendrá, y al igual que la Unión Europea, cuyos representantes también fueron parte de este importante encuentro en España, también suministrarán más equipo militar para la lucha que se libra contra las fuerzas de Putin.
"El presidente Zelenskyy dejó en claro que Ucrania depende de nuestro apoyo continuo. Y nuestro mensaje para él fue igualmente claro. Ucrania puede contar con nosotros, por el tiempo que sea necesario. Los aliados (de la Alianza Atlántica) continuarán brindando una importante ayuda militar y financiera. Y hoy, los líderes acordaron fortalecer nuestro apoyo al acordar un paquete de asistencia integral para Ucrania. Esto incluye comunicaciones seguras, combustible, suministros médicos y chalecos antibalas. Equipos para contrarrestar minas y amenazas químicas y biológicas. Y cientos de sistemas portátiles antidrones", explicó Stoltenberg en una rueda de prensa.
"A más largo plazo, ayudaremos a Ucrania a pasar de equipos de la era soviética a equipos modernos de la OTAN. Impulsar la interoperabilidad. Y fortalecer aún más sus instituciones de defensa y seguridad. Todo esto demuestra nuestro compromiso con el futuro de Ucrania y que nuestro compromiso es inquebrantable. Una Ucrania fuerte e independiente es vital para la estabilidad de la zona euroatlántica", agregó Stoltenberg al respecto.
El compromiso del organismo con Ucrania parece sólido, y se resumió en las palabras de Stoltenberg: "Una Ucrania fuerte e independiente es vital para la estabilidad de la zona euroatlántica".
Por otro lado, Joe Biden, presidente norteamericano, anunció este jueves en el cierre de la Cumbre que su Gobierno brindará más ayuda a Kiev, capital ucraniana. Un paquete de ayuda militar de 800 millones de dólares, que incluye armas ofensivas y sistemas de defensa aérea. "La guerra no terminará con una victoria de Rusia sobre Ucrania", dijo Biden en su intervención.
El presupuesto para invertir más en la OTAN también aumentará, al igual que los presupuestos comunes de sus miembros. Además, se acordó "profundizar relaciones con algunos de los socios más cercanos de la Alianza, sobre todo en el Indo-Pacífico".
"Hacer más costará más"
"Hoy, los aliados volvieron a comprometerse con el compromiso que hicimos en 2014 de gastar al menos el 2 % del PIB (Producto Interno Bruto) en defensa. Desde 2014, los aliados europeos y Canadá han gastado 350,000 millones de dólares estadounidenses adicionales. Nueve Aliados ahora alcanzan, o superan, el objetivo del 2 %. Diecinueve Aliados tienen planes claros para alcanzarlo en 2024. Y otros cinco tienen compromisos concretos para cumplirlo a partir de entonces. El dos por ciento lo ve cada vez más como un piso, no como un techo", explicó el Secretario General de la OTAN.
"Los aliados también están invirtiendo más en capacidades modernas, contribuyendo más a los despliegues y ejercicios de la OTAN. Y hemos acordado aumentar la financiación común de la OTAN, para financiar las instalaciones que necesitamos para el refuerzo. Además de más entrenamiento y más ejercicios, comando y control, y compromiso con los socios", cita el organismos, agrandando su escudo de defensa militar y nuclear, del que podrían depender millones de vidas en caso de agresiones como la sufrida ahora en Ucrania.
La última sesión de la Cumbre de Madrid se centró en "las amenazas y los desafíos de Oriente Medio, África del Norte y el Sahel" debido a que "la inseguridad en estas regiones tiene un impacto directo en la seguridad de todos los Aliados".
Los mandatarios durante una visita al Museo del Prado:
"Nuestro nuevo Concepto Estratégico identifica el terrorismo como una de las principales amenazas a nuestra seguridad", cita la declaración conjunta de los países de la OTAN. "Las decisiones que hemos tomado en Madrid asegurarán que nuestra Alianza continúe preservando la paz, previniendo conflictos y protegiendo a nuestra gente y nuestros valores. Europa y América del Norte, juntos en la OTAN".
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