Ramona Rodríguez y la mutación del aparato universitario sandinista: de la represión académica a la pedagogía del emprendimiento
- Jairo Videa
- hace 2 días
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Hasta ahora, se desconoce el cuerpo docente, la acreditación oficial o el diseño curricular completo de la nueva Universidad de Emprendedores. La exrectora de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-Managua) ha insistido en que la recién inaugurada institución está pensada para jóvenes y adultos "con ideas" y que "ya hay una base gracias al trabajo del buen gobierno", sin detallar procesos de admisión, evaluación académica ni estándares internacionales.
Por Jairo Videa | @JairoVidea
Managua, Nicaragua
En menos de un mes, Ramona Rodríguez Pérez, figura central de la represión universitaria en Nicaragua y hasta hace poco presidenta del Consejo Nacional de Universidades (CNU) y rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-Managua), ha pasado del ostracismo administrativo a la reinvención política y partidaria dentro del mismo aparato estatal que la removió. Su nueva trinchera es la Universidad de Emprendedores "La Sandino", un proyecto que, lejos de representar una apuesta real por el conocimiento y la innovación, encarna la consolidación de una maquinaria educativa subordinada al poder político y militar.
La inauguración del centro fue presentada el domingo 25 de mayo en el programa oficialista "15 Minutos", transmitido por Viva Nicaragua – Canal 13. En la entrevista, Rodríguez apareció por segunda vez desde su abrupta salida del CNU y la UNAN-Managua el pasado miércoles 14 de mayo de 2025. Junto a Camila Ortega Murillo, hija de la pareja copresidencial y directora de la Comisión Nacional de Economía Creativa —quien ha sido pieza clave en el rediseño ideológico de la narrativa institucional del sandinismo—, inauguraron oficialmente el lunes 19 de mayo una entidad que estará "orientada para la promoción y creación de emprendimientos". "Tiene como propósito atender y capacitar anualmente a 2,000 protagonistas, jóvenes y emprendedores", señaló Camila.
Pero Rodríguez no se refirió a su destitución, en ningún momento, ni a las razones de su desaparición pública durante más de dos semanas. Tampoco mencionó las múltiples acusaciones por su papel en la represión estudiantil desde abril del año 2018, ni su inclusión en la llamada "Lista Engel" por parte del Departamento de Estado de los Estados Unidos de Norteamérica (EE.UU.). En cambio, apareció sonriente, hablando de "formar emprendedores" y "fomentar la innovación", como si su historial al frente de la UNAN-Managua no existiera.
Según lo expuesto por la exrectora, la Universidad de Emprendedores "La Sandino" será un centro de formación "revolucionario", con un enfoque en "el aprender haciendo" y el desarrollo de "capacidades emprendedoras" entre jóvenes y adultos. En su intervención, Rodríguez insistió en que el proyecto responde a una visión de gobierno enfocada en fortalecer la economía desde las pequeñas y medianas empresas, y que articula esfuerzos con otras instancias como el Ministerio de Economía Familiar, Comunitaria, Cooperativa y Asociativa (MEFCCA).
"La universidad tiene la misión de formar profesionales jóvenes, emprendedores, fomentar la cultura de investigación y de innovación", dijo. Aunque su discurso repitió conceptos como "tecnología", "calidad de vida" y "mejora continua" una y otra vez, nunca precisó planes de estudio, metodologías pedagógicas, acreditaciones ni lineamientos técnicos de funcionamiento. En su lugar, apeló a frases vacías como "espacio revolucionario", "universidad especializada" y "proyección para los jóvenes".
No obstante, esta "nueva misión" no borra el rol histórico de Rodríguez como pieza clave del control ideológico y disciplinario sobre la educación superior en Nicaragua, particularmente durante los años más oscuros del régimen del oficialista partido Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) tras la insurrección cívica, en medio de la actual crisis múltiple que vive el país centroamericano.
Ramona Rodríguez fue responsable directa de la transformación de la UNAN-Managua en un enclave de represión y adoctrinamiento. Durante su gestión, iniciada oficialmente en agosto de 2015, centenares de estudiantes fueron expulsados sin procesos administrativos formales, profesores críticos fueron despedidos, y la autonomía universitaria —amparada constitucionalmente— fue progresivamente demolida, en medio de una operación institucional y jurídica que impulsó el cierre o la confiscación de más de 30 universidades en todo el territorio nacional.
La escena que selló su infamia ocurrió el viernes 13 de julio de 2018, cuando permitió el ingreso de fuerzas policiales y paramilitares al Recinto Universitario Rubén Darío, donde estudiantes se encontraban atrincherados tras varias semanas de protestas. La embestida, conocida como la matanza policial y parapolicial en la iglesia capitalina Divina Misericordia, dejó varios heridos, una iglesia católica con impactos de bala y una comunidad universitaria marcada para siempre. Rodríguez nunca rindió cuentas por ese operativo ni por la violencia que lo rodeó. En lugar de eso, se consolidó como una operadora ideológica de la monarquía de Daniel Ortega y su esposa y comandataria Rosario Murillo.
En diciembre de 2023, el Departamento de Estado de EE.UU. la sancionó por sus vínculos con violaciones graves a los derechos humanos, señalando su implicación en el desmantelamiento de universidades privadas, el adoctrinamiento político y el cierre de espacios académicos independientes. Pese a estas sanciones, el régimen no la alejó completamente del sistema, por fortuna o desgracia. Su reciente "designación" como coordinadora de una Extensión Universitaria y de la nueva Universidad "La Sandino" demuestra que, en Nicaragua, el castigo está reducido por mucho o poco a sólo una reubicación, o un encarcelamiento, o el destierro, o la confiscación, en otros muchos casos.
La creación de la Universidad de Emprendedores "La Sandino" es parte del llamado "reordenamiento institucional" impulsado por la Secretaría Jurídica de la ahora Copresidencia, que contempla la transformación del CNU en el Consejo Nacional de Rectores de Universidades (CNRU). Este nuevo organismo, según fuentes oficiales consultadas por este medio, "coordinará y dirigirá" tanto a las universidades públicas como privadas, centralizando aún más el control educativo desde la Copresidencia.
La Secretaría Técnica Especializada del CNRU, liderada por Bismarck Santana, controlará registros académicos, procesos de acreditación y desarrollo tecnológico, mientras que el manejo presupuestario quedará en manos de la Procuraduría General de la República (PGR) y el Ministerio de Hacienda. En este panorama, la Universidad "La Sandino" se convierte en un satélite ideológico y funcional de ese nuevo esquema de control, donde el emprendimiento no es sino otro rostro de la obediencia, como la Universidad en Ciencias Policiales Leonel Rugama "Que se rinda tu madre" (UCPLRQRM) y la Universidad de Ciencias Médicas y Enfermería Dr. Julio Briceño (UCMEDJB), fundadas el viernes 24 de marzo de 2023.
Camila Ortega Murillo, principal impulsora del proyecto, ha promovido una narrativa que vincula "creatividad", "emprendimiento" y "revolución" en una misma lógica simbólica. La presencia de Rodríguez en esta plataforma refuerza además la idea de que el régimen no cede espacios, sino que los reconfigura para que sus leales permanezcan en posiciones de influencia, por muy mínima que sea.
Hasta ahora, ninguna institución del Estado ha abierto una investigación sobre las acciones de Rodríguez durante su gestión en la UNAN-Managua ni en el CNU. No ha sido llamada a comparecer por las expulsiones arbitrarias, las represalias a docentes, ni las violaciones a la autonomía universitaria. En cambio, se le premia con un nuevo rol: el de educadora de la nueva generación de "emprendedores revolucionarios".
Al eliminar la página del Consejo de Dirección Superior de la UNAN-Managua, el régimen intenta reescribir la historia reciente sin asumir responsabilidades. La ausencia de justicia, verdad y reparación para las víctimas del aparato universitario sandinista es hoy más evidente que nunca. En ese contexto, la Universidad de Emprendedores "La Sandino" no es una propuesta académica genuina, sino una herramienta para maquillar el rostro del régimen y reciclar a sus más leales operadores, ocupando espacios confiscados. Ramona Rodríguez, quien también ostentó la Presidencia del Consejo Superior Universitario Centroamericano (CSUCA), se desplazó a un nuevo escenario donde continuará ejerciendo influencia, esta vez bajo el disfraz del "emprendimiento". Y mientras tanto, decenas de estudiantes exiliados, profesores expulsados y campus silenciados siguen esperando justicia.
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