El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo de León, expuso su visión sobre la democracia, el desarrollo y la cooperación internacional durante su intervención en el 79º Período de Sesiones de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), este martes 24 de septiembre de 2024 en Nueva York, Estados Unidos de Norteamérica. En su discurso, el mandatario subrayó el papel crucial de la población guatemalteca en la defensa de la democracia, así como su firme compromiso en la lucha contra la corrupción.

Arévalo inició su presentación destacando que su elección fue el resultado de un claro mandato popular, donde la ciudadanía rechazó las viejas prácticas corruptas que habían marcado el pasado del país. "La democracia de Guatemala no podría existir sin el valiente impulso de los pueblos mayas y la diversidad cultural que conforma nuestra nación", declaró. Su gobierno, enfatizó, tiene la responsabilidad de fomentar la unidad entre estas diversas comunidades y construir un futuro próspero a su alrededor.

El presidente expresó su gratitud a las naciones y pueblos que apoyaron a Guatemala en su proceso histórico de 2023, destacando la importancia del diálogo y el consenso nacional para fortalecer las instituciones democráticas. "No podemos seguir tolerando la corrupción", aseveró Arévalo, calificándola como un ancla que frena el progreso y obstruye la construcción de una sociedad basada en el bien común.

Solidaridad internacional

Arévalo hizo un llamado a revitalizar el multilateralismo y fortalecer el diálogo global para abordar los desafíos urgentes que enfrenta la humanidad. "Es momento de rescatar el multilateralismo y de actuar con responsabilidad ante los conflictos que amenazan la paz", añadió, haciendo referencia a situaciones críticas en Ucrania, Gaza y Sudán. Su llamado a la paz fue claro: no tolerar la guerra ni ignorar las violaciones a los derechos humanos que surgen de estos conflictos.

Además, el mandatario guatemalteco abogó por una reforma al Consejo de Seguridad de la ONU, enfatizando la necesidad de un enfoque más democrático y pacifista. Criticó el uso del derecho de veto que, según él, obstaculiza decisiones necesarias para la paz global. "No es aceptable que se dejen de tomar decisiones a favor de la paz por el derecho que ejercen unos pocos", afirmó.

Migración y cambio climático

En su intervención, Arévalo también abordó la cuestión migratoria, enfatizando el compromiso de Guatemala con el respeto a los derechos de los migrantes y la importancia de mantener un trato digno para quienes buscan nuevas oportunidades. Recordó que Guatemala ha acogido a 135 nicaragüenses liberados por el régimen sandinista de Daniel Ortega y Rosario Murillo, reafirmando el papel del país centroamericano como un "refugio" de dignidad y libertad.

El presidente también destacó el cambio climático como uno de los mayores desafíos globales, que afecta la economía y la seguridad alimentaria. Subrayó que, a pesar de ser uno de los países que menos gases de efecto invernadero emite, Guatemala sufre las consecuencias de eventos climáticos extremos. "La responsabilidad para resolver la crisis climática es compartida", concluyó Arévalo, instando a las naciones más desarrolladas a asumir su parte en la mitigación de esta crisis.